¿Verdad o mito? Las pruebas de que los astronautas de la NASA llegaron la Luna
El 20 de julio de 1969, hace 55 años, dos seres humanos caminaron por primera vez en la Luna. Décadas después todavía hay quienes aseguran que eso jamás sucedió y todo es parte de un elaborado engaño.
Para zanjar de una vez por todas el debate, he aquí las pruebas que demuestran que los astronautas de la NASA sí viajaron a la Luna.
Las misiones Apollo generaron una cantidad enorme de material técnico y científico, del cual mucho se encuentra disponible. Los sitios en internet de la NASA alojan 8400 fotografías de las misiones Apollo, hay horas y horas de vídeo, transcripciones de los diálogos entre los astronautas y el Control de Misión, además existen muestras del suelo lunar.
En el Proyecto Apollo participaron 400 000 personas: de la NASA, de Universidades, de Institutos de Investigación, de empresas aeroespaciales y de Oficinas de Gobierno, fue un grupo de personas con diferentes ideologías, religiones y nacionalidades. Sería imposible que todos guardaran un secreto.
NO SOLO LA APOLLO 11
Se recuerda más a los astronautas Neil Armstrong y Buzz Aldrin como los primeros en caminar en la Luna, pero hubo más astronautas involucrados en el viaje a la Luna. En total volaron 27 astronautas alrededor de la Luna y 12 de ellos alunizaron.
Cada misión era de tres astronautas, en las misiones de alunizaje, uno se quedaba en órbita lunar y dos bajaban a la Luna. La Apollo 8 voló alrededor de la Luna, la Apollo 9 no viajó allá porque realizó unos ejercicios en la órbita terrestre. La Apollo 10 simuló el alunizaje a 14 km de altura sobre la superficie lunar. La Apollo 11 fue la primera en alunizar y le siguieron la Apollo 12, 14, 15, 16 y 17. La Apollo 13 sobrevoló a la Luna pero no alunizó, debido a un fallo en la nave espacial.
Los astronautas de las Apollo trajeron 382 kg. de rocas lunares, que hoy se encuentran en museos e institutos de todo el mundo
El viaje a la Luna no es fácil ni barato y por ello no se ha regresado. Al parecer esto cambiará pronto. Para antes de 2030, la NASA planea el regreso a la Luna con la misión Artemisa. Mientras tanto, Rusia y China alistan el desembarco lunar para después de 2030. La carrera Lunar está en marcha.
Mucho equipo se llevó a la Luna, con él se ha medido el viento solar, los sismos lunares, el campo magnético, el polvo lunar y mucho más. Los astronautas de las Apollo 11, 14 y 15 dejaron allá unos espejos retroreflectores, y también los llevaron los vehículos soviéticos Lunojod 1 y 2.
Estos retroreflectores presentan una geometría interesante, permiten reflejar la luz en la misma dirección de donde llegó. De esta forma, varios observatorios en todo el mundo pueden dispararles un láser y la luz se reflejará en la misma dirección. Sería imposible recibir la luz de no existir estos espejos. Así, conociendo la velocidad de la luz y midiendo el tiempo que tarda el láser en ir y venir, se calcula la distancia a la Luna. Gracias a estos aparatos conocemos que la Luna se aleja de la Tierra 3.8 cm por año.
LAS ROCAS LUNARES
Los astronautas de las Apollo trajeron 382 kg. de rocas lunares, que hoy se encuentran en museos e institutos de todo el mundo. En México hay dos rocas, una de la Apollo 11 y otra de la Apollo 17, en el Museo Universum de la UNAM.
A pesar de la Guerra Fría, Estados Unidos donó muestras del suelo lunar a la Unión Soviética en un gesto de buena voluntad. Algo descabellado si las muestras fueran falsas. De igual forma, la Unión Soviética donó a Estados Unidos muestras traídas por sus misiones automáticas.
Se recuerda más a los astronautas Neil Armstrong y Buzz Aldrin como los primeros en caminar en la Luna, pero hubo más astronautas involucrados en el viaje a la Luna
Los científicos de ambas naciones, estudiaron y compararon las muestras lunares, encontraron que son similares, lo que demuestra su mismo origen.
En años recientes, nuevas muestras lunares para comparar han llegado a la Tierra, gracias a las misiones Chang’e 5 y Chang’e 6 de China.
Como en la Luna no hay viento ni erosión, las huellas de los astronautas y de sus vehículos siguen ahí. No las podemos ver con telescopio pero si desde la órbita lunar.
Gracias a la sonda de la NASA Lunar Reconnaissance Orbiter (LRO), que sobrevuela a nuestro satélite natural desde 2009, podemos ver las zonas de alunizaje, las huellas de los astronautas, del vehículo lunar o los Módulos de Alunizaje.
Entre 2007 y 2009 la ambiciosa sonda Kaguya (Selene) mapeó la Luna con una gran resolución. Con ella se confeccionó un mapa en 3D de la superficie de nuestro satélite.
Con estos datos, los científicos compararon las coordenadas de los lugares de alunizaje y las fotografías de los astronautas en la Luna con los datos de Kaguya. Observaron en las imágenes, las mismas deformaciones del suelo, protuberancias, depresiones o cráteres que aparecen en los mapas de Kaguya, algo imposible de recrear en un supuesto fraude.
LA UNIÓN SOVIÉTICA
Por último, tal vez la mejor prueba de los alunizajes de las Apollo no venga de los Estados Unidos o de sus aliados, sino de la antigua Unión Soviética.
Después de la Apollo 11, la Unión Soviética tuvo varias misiones automáticas exitosas en la Luna, y algunas regresaron a la Tierra con muestras del suelo lunar.
Tras los primeros pasos en la Luna, Estados Unidos se autoproclamó líder indiscutible en la exploración espacial. Si la Unión Soviética hubiera sospechado de un fraude de la NASA, tenían la tecnología y sobretodo la motivación para demostrarlo y habrían ridiculizado a los Estados Unidos a nivel internacional. Esto jamás sucedió.