Recientemente se dio a conocer el caso de una joven que fue víctima de sexting por parte de su expareja, pues el hombre compartió imágenes íntimas de ella sin su consentimiento, con las cuáles ofrecía supuestos servicios sexuales, como una forma de venganza. Asimismo el hombre la ha estado siguiendo por lo que May (nombre de la víctima) teme por su integridad.
Este caso aún no ha tenido avances significativos, por lo que es importante que conozcamos un poco más sobre de qué se trata este delito, qué consecuencias puede tener para la víctima y cuál es la pena para quien lo cometa. Además de que si hay alguna persona que esté pasando por algo similar, tenga las herramientas para actuar.
¿Qué es el sexting?
El término sexting es utilizado para describir el envío de mensajes, fotografías y video con contenido sexual o erótico que se intercambia entre dos o más personas.
Esta práctica lleva muchos años existiendo e inició siendo consensuada bajo el acuerdo de que esas fotos o videos sólo se quedarían entre los participantes de la conversación, sin embargo, con el paso del tiempo, el sexting ha sido utilizado para dañar o chantajear a otras personas.
El sexting a lo largo del tiempo ha sido utilizado por personas de todas las edades, sin embargo, últimamente se han visto más casos en personas jóvenes, sobre todo en menores de edad.
Las y los adolescentes son quienes se encuentran más expuestos, pues usualmente cuando el sexting es practicado entre adultos, se cuidan de no mostrar la cara, señas particulares, entre otros, algo que muchas veces los menores no hacen, en ocasiones porque son presionados para tomarse fotos desnudos por parte de personas que casi siempre son mayores que ellos.
Uno de los mayores problemas del sexting es que todo el contenido que subimos a internet o pasamos por redes sociales, corre riesgo de ser visto por personas que no queremos o que no conocemos, por lo que dejamos de tener control sobre él y hay quienes pueden hacer mal uso de ese material.
Además, si nos roban el teléfono o hackean nuestras cuentas de redes sociales, corren riesgo tanto nuestras fotografías, como las que alguien nos haya enviado.
¿Qué repercusiones puede traer el sexting?
En muchas ocasiones el sexting es practicado entre parejas, por lo que cuando rompen y quedan en malos términos, algunas personas con afán de lastimar, avergonzar o exhibir a su expareja, difunden o publican las fotos íntimas que compartieron, algo que trae graves repercusiones en la víctima.
Cabe resaltar que aunque los casos de sexting entre parejas son más comunes, no son los únicos que existen, pues también hay varios casos entre “amigos” o personas desconocidas.
El uso del sexting puede originar varios delitos virtuales, entre los que destacan el ciberacoso o ciberbullying, la sextorsión o el grooming, sobre todo en el caso de menores de edad. Además de que puede afectar gravemente en el autoestima y la vida diaria de las víctimas, pudiendo provocar incluso casos de suicidio.
¿Qué es el ciberacoso, la sextorsión y el grooming?
Ciberacoso o ciberbullying:
El ciberacoso se refiere al acto que hace una o varias personas en el que buscan (como su nombre lo indica) acosar, denigrar y humillar a alguna persona por medio de redes sociales debido al contenido íntimo que se compartió sin su consentimiento.
Sextorsión:
Este término de sextorsión hace referencia al acto de chantajear, amenazar o extorsionar a alguna persona diciéndole que publicarás o enviarás fotografías o videos íntimos de otra persona si no hace o dice algo que tú le pidas.
Muchas veces, sobre todo en el caso de los menores de edad, algunas personas amenazan con hacer daño a sus seres queridos si no se toman fotos o videos con contenido erótico o sexual.
Grooming:
El grooming se refiere a una práctica que realizan los adultos donde buscan ganarse el cariño y la confianza de adolescentes o niños, buscando intercambiar contenido de índole sexual por medio de redes sociales.
El sexting puede afectar gravemente en el autoestima y la vida diaria de las víctimas/Foto: Pexels
El grooming puede ir escalando a tal grado, de que el adulto puede pedirle al menor verse en algún lugar para practicar actos sexuales.
Si niños o adolescentes se ven involucrados en la práctica del sexting, las personas que las o los incitaron a tomarse fotografías de índole sexual podrían caer en delitos como la pornografía infantil, delitos contra la intimidad, pederastia, entre otros, los cuáles también son fuertemente castigados.
Sexting: ¿La difusión de imágenes íntimas sin consentimiento es castigada?
Según la página oficial del Gobierno Federal, la difusión de imágenes íntimas sin consentimiento de quien aparece en ellas sí es castigada, ya sea con multa o con años de prisión.
Hace algunos años se creó la Ley Olimpia, la cual protege a todas las personas que fueron víctimas de sexting y de violencia digital en general. Esta ley fue impulsada por la activista Olimpia Coral Melo, quien fue víctima de un video íntimo sin su consentimiento.
Actualmente la Ley Olimpia está presente en varios estados de México entre los que se encuentran Chihuahua, Baja California Sur, Coahuila, Zacatecas, Jalisco, Aguascalientes, Oaxaca, Veracruz, Querétaro, Estado de México, Guanajuato, Puebla, Yucatán, Nuevo León, Chiapas, entre otros.
Gracias a esta ley, quienes compartan imágenes o videos íntimos sin consentimiento de quien aparece en ellas podrían pasar de tres a seis años de prisión y tendrán que pagar una multa de entre los 20 mil hasta más de 42 mil pesos, las sanciones dependen de cada estado.
Sanciones por cometer sexting en Chihuahua
En Chihuahua, por ejemplo, en el artículo 180 bis. del código penal, aparece que “A quien reciba u obtenga de una persona, imágenes, textos o grabaciones de voz o audiovisuales de contenido erótico o sexual y las revele o difunda sin su consentimiento y en perjuicio de su intimidad, se le impondrá de seis meses a cuatro años de prisión y de cien a doscientos días de multa”.
Además, dentro del mismo artículo aclara que si el delito fue cometido en perjuicio de una persona menor de 14 años, las sanciones podrían aumentar “en una mitad”, aún cuando “mediare su consentimiento”.
Así que si estás pasando por una situación similar, es importante que cambies tus contraseñas, reúnas todas las pruebas que puedas y te acerques a las autoridades para denunciar, ¡no estás sola o solo!
